por IvanVi Vie 05 Feb 2010, 11:06 pm
Hola amigos:
Ayer fue un día mjuy especial, sobre todo porque tuve la suerte de conocer en persona a Paco-Pi. El tío se vino desde Valladolid a Frómista para compartir cena, café y patxaran (que no falte) conmigo. Paco, me hizo mucha ilusión, te lo agradezco de corazón. Eres un crack.
04/02/2010
Dejo Burgos triste, llorando la salida de los peregrinos que pasamos allí la noche. La lluvia, aunque suave, no nos abandona hasta casi Hontanás. Me encuentro con una peregrina que viene de Méjico para hacer el Camino y me bajo de la bici para recorrer un par de kilómetros con ella y charlar un poco. Esta es una de las cosas increibles del Camino. Te paras a charlar con gente que no conoces de nada y entablas conversación en segundos como si os conociéseis de toda la vida.
A partir de ahí llega el "drama". Los que habéis leído las crónicas de Paco y su avería llegando a Cartrojeriz con la bici (todo roto) sabéis de qué hablo. Pues bien, Paco me avisó la tarde anterior y segí sus consejos. Aún así, entre Hontanás y Castrojeriz no rompí la bici de milagro. Eso sí, ante el riesgo me bajé y anduve empujando a mi compañera para no dañarla irremediablemente. Vaya barro, nunca había visto nada igual. Ahora comprendo a Paco a la perfección. A mi regreso a casa, ya os enviaré las fotos.
Me llama el cachondo de Paco y me pregunta dónde ando. Le digo que en Frómista y medice, "luego te llamo". Y toma Ábnel del Camino, en una hora me aparece el tío en mi habitación,... digo litera, ... del albergue de Frómista, así, con un par. Se lo agredezo mogollón. Me hizo una gran ilusión y lo pasé con él de vicio. Es un tío para conocer. Por cierto, le debo una cena cuando esté en mi tierra, la de naciemiento o la de acogida, eso da igual.