Ten en cuenta que todos tenemos un día malo, puede ser el más bonito del mundo y a ti pillarte en horas bajas, así que la sabiduría está en saber identificarloy esquivarlo lo mejor que se sepa.
Vivelo en el día a día, el minuto a minuto, no busques metas imposibles, simplemente da pedales, mira el paisaje y piensa como mucho en la comida siguiente, así disfrutarás más de cada momento.
En fín, que no te agobies, algunos que estamos más gordos que tú lo hemos conseguido, y no somos ni mejores ni peores, tan solo lo hemos conseguido.
Y si no lo consigues, ultreia, el Camino siempre te estará esperando.
Un saludo.