por PapáGrino Mar 15 Jun 2010, 6:14 pm
Una alta
ejecutiva se hospeda en un hotel durante
un viaje de
trabajo y al sentirse un poco 'SOLA' y
con una sensación de libertad que
nunca había
sentido, decidió llamar a una de esas 'empresas
de
acompañantes' , que reparten propaganda a la salida
de los
aeropuertos.
Si bien los servicios están pensados
principalmente para
hombres, entre los papeles que
tenía, encontró a uno que ofrecía literalmente
el
servicio masculino y en especial le llamó la
atención, uno llamado
'Ferótico'.
Después de analizar con cuidado la fotografía,
se decidió a
llamarlo.
Con el folleto en sus manos -que temblaban y
sudaban por la
expectativa- levantó el teléfono y
marcó el número que indicaba el
panfleto.
EL: '¡Hola!', contestó un hombre con una
sensual
voz.
ELLA: Hablo del hotel Libertador, habitación
421
EL: Si, si
ELLA: Leí el folleto y veo que sabes de masajes
y
la verdad es que necesito que vengas a mi habitación
y me des uno
urgente ... A decir verdad, necesito
masajes relajantes, casi mimos.... ¡No,
espera! en
realidad lo que quiero es sexo. Tengo ganas de
tener una larga
sesión de sexo salvaje.
Quiero hacerlo en la cama, en el suelo, en
el
balcón, en el pasillo, en la ducha. Quiero
exhibirme, sentirme
humillada, que veas lo puta que
soy. Pero ¡ya! Estoy hablando en serio, deseo
que dure
toda la noche y estoy dispuesta a participar en
variadas y
atípicas cosas ... si algo tiene un
nombre que puedas pronunciar ¡yo quiero
hacerlo!
Trae toda clase de elementos, accesorios y juguetes
para que te
asegures que me mantendré despierta
¡toooda la noche.....! Quiero que me
inmovilices
y que me llenes el cuerpo con lo que quieras, para
después
limpiárnoslo uno al otro...con la lengua o
lo que quieras ¿qué te parece? Es
más, si
puedes venir con un amigo, ven, que quiero que me
hagan de todo y
sentirme dilatada y destrozada. ¿Qué
te parece?
EL: La verdad que
suena fantástico... pero,
señora, para hacer llamadas externas primero
tiene
que marcar el 0.