por EMER2001 Vie 18 Jul 2014, 7:04 pm
Hola, después de leer todos los mensajes de este post voy a echar un poco más de leña al fuego. El 13 de Junio llego a Fisterra, me alojo en el Hostal Finistellae y tengo contratado el envío de la bici más alforjas con SEUR a través de Bicigrino. Decir que yo soy de Mallorca y no hay otro sistema que por paquetería.
Bien. En el Hostal Finistellae excelente atención. Todo son facilidades y se desviven por solucionarte cualquier pequeño problema que puedas plantear. Lamento no acordarme de los nombres de sus dueños y encargados, pero desde aquí mi más sincero agradecimiento.
Total, que dejo la bici (e-bike, para más señas) preparada (desmontados pedales, manillar girado y asegurado, quitados todos los extras que se pueden romper, etc) y las alforjas. Ambas cosas juntas y etiquetadas con unos letreros con mi nombre y dirección que llevé desde Mallorca. No puede meterla en una caja porque me indicaron que los "expertos" eran los de SEUR y ellos se encargaban.
Ahí deje la bici y volví por avión hasta Mallorca. Primero me llaman de SEUR Mallorca el miércoles 18 de junio y me dicen que la bici ya está en su almacén, que pase a buscarla. Tras discutir con ellos explicándoles que el servicio contratado incluía la entrega en domicilio, comentarles que en anteriores viajes siempre me la habían llevado a casa y que fueran preparando las hojas de reclamaciones, me dijeron que mirarían si el repartidor me la podía traer, pero que no garantizaban ninguna franja horaria.
Como uno tiene el vicio y la suerte de trabajar, el jueves 19 yo no estaba en casa cuando trajeron la bici. No fui hasta el sábado y allí estaba empaquetada, en una caja rota, sujeta por la parte superior con un solo trozo de cinta de unos 30 cm. Abro la caja para sacar la bici y....... NO ESTÁN LAS ALFORJAS. La bici está tal como la deje, sin daños. El letrero que llevaban las alforjas en el exterior de la caja, pero las alforjas han desaparecido.
Inmediatamente llamo a SEUR (un 902, un sábado por la mañana).... que toman nota. Llamo al Hostal Finistellae por si se las hubieran dejado alli. La dueña inmediatamente se preocupa del tema, comprueba que no están y me dice que tiene un amigo en SEUR Santiago que, aunque sea sábado le llamará. A los 10 minutos me llama Juan Carlos de SEUR Santiago (la bici la envió SEUR Coruña) y me dice que se ocupará personalmente del asunto.
Durante los siguientes 15 días, Juan Carlos me llamó casi diariamente informándome de la búsqueda que estaba realizando y pidiendo disculpas por algo que no era su responsabilidad. Informaron de la situación a Tomás, de Bicigrino, con el que a partir de ese momento estuve en contacto permanente vía email.
Trascurridas 3 semanas sin aparecer y sin recibir noticias de SEUR nacional (el 902 al que llamé) ni de SEUR Mallorca decido volver a poner la reclamación. SORPRESA... la indemnización total, por pérdida de la bici y alforjas asciende a la cantidad de......89 € (15 kg que declara SEUR x 5.92 € por kilo declarado), que se me abonarán cuando la responsable tramite el expediente, si se demuestra no se qué, cuando vuelva de vacaciones. Todo esto en SEUR Mallorca.
Cuando comento a Juan Carlos (SEUR SANTIAGO) y a Tomás (Bicigrino) que el contenido de las alforjas asciende a más de 700 € y que además hay piezas de la E-Bike sin las que no puedo circular, me comentan que hablarán con SEUR. Pasan un par de horas y me llaman. BICIGRINO se hace cargo del valor real de las alforjas.
Aquí está el punto de inflexión. SEUR cometió varias negligencias profesionales impropias e inaceptables en una empresa de su fama. Primero empaquetó mal la bici y alforjas. Segundo, no tuvo el cuidado exigible en el transporte del paquete y tercero, si alguien tiene unas alforjas de bici...¿de quién son?
Tomás de Bicigrino asumió una responsabilidad que no le correspondía, y en un gesto del más puro espíritu del Camino asumió el coste de los daños y perjuicios. Juan Carlos de SEUR Santiago realizó un trabajo que le correspondía a SEUR Coruña, lo hizo a nivel personal, como se hacían antes las cosas, ayudando a los peregrino. Para ellos dos solo tengo palabras de agradecimiento y desde hoy tienen en mi a un amigo incondicional.
Pero la historia acabó bien... el mismo día que Bicigrino asume el coste.... aparecen las alforjas. Las tenía un señor no sé dónde, que esperaba que SEUR las fuera a buscar. Cuando vio (3 semanas) que no iba, llamo al hostal finistellae.... el resto ya es historia. Las alforjas llegaron intactas día 11 de julio a mi casa.
Sirva esta hecho para ensalzar el espíritu del Camino que todavía poseen algunas personas y también para comprobar la poca profesionalidad de algunos elementos de SEUR, que se ve compensada por el exceso de celo y dedicación personal de personas como Juan Carlos de SEUR Santiago. Una vez más muchas gracias.... el albariño buenísimo.
Aviso a navegantes.... la próxima vez contrataré el seguro adicional que ofrece SEUR. Había hecho esto varias veces y nunca había tenido ningún problema. Pero de la experiencia se aprende.
Perdonad el rollo y Buen Camino.