por Invitado Jue 23 Jul 2009, 3:46 pm
Hay muchas cosas que puedes hacer en Santiago como para querer venirte nada más llegar.
Lo primero, saborear tu azaña, darte una buena comilona tranquilamente si llegas antes del mediodía, o una buena cena con alguno de los ricos caldos si lo hicieras más tarde, en cuyo caso lo mejor es recoger la compostelana al día siguiente y escuchar tu nombre en misa, aparte de abrazar al Santo, que tengas o no, creencias religiosas siempre es emotivo, es como un final oficial digamos.
Luego viene lo de encontrar alojamiento, aunque ya le tengas reservado has de dar con él, acomodarte y demás.
Luego viene lo de acomodar la bici en buen lugar, saber que vas a hacer con ella, si mensajería, si hay que desarmarla, tren, autobus, etc.
Mas adelante tendrás que comprar recuerdos, que aunque parezca una tontería, siempre gustan a los que están en casa, aunque te gastes nada más que un euro por cabeza.
Y claro, supongo que tampoco querrás dejar pasar la oportunidad de recorrer las calles de Santiago de forma tranquila y sosegada y al final de la jornada, pues descansar en una cama pensando en que al día siguiente no has de montar en bici, y sobre todo en los que te quedaste en casa.
En fín, que supongo que cada una de las cosas que te he ido enunciando supondrá un poquillo de tiempo, así que deja que Santiago entre en tí, disfrutalo al menos un día y empieza a hacer planes al día siguiente al menos.
Un saludo.