Contentos y felices comenzamos a pedalear a eso de las 7.45 .. tempranito por la caló que ya venía avisando.
Lo mejor de todo, los paisajes y estar en plena naturaleza .. lo peor de todo la caló, un par de arenales y una subida corta pero pedregosa después de pasar Aljucen.
Los colores amarillos y dorados del suelo de la dehesa en verano no tienen desperdicio. Los animalillos que vimos, una gozada, sobre todo un zorro que si advirtió nuestra presencia, disimuló muy bien jajajaja
Poca gente haciendo la Vía. En la ida y a la salida de Mérida un par de peregrinas, en el Camino sólo nos adelantó un bicigrino que llevaba una marcha del carajo subiendo y en la vuelta (por la ctra por culpa de la caló que axfisiaba) nos cruzamos con otros dos. No sé si alguno de ellos era Papagrino, el caso es que no paramos por el agobio de llegar cuanto antes a Mérida (habíamos perdido la bomba de inflar y Paco iba estresado por esa y otras razones)
No llegamos a Alcuescar, más que nada porque a las 11.30 de la mañana más o menos que llegamos al Cruce de las Herrerías, la caló ya no daba mucha tregua, por lo que decidimos darnos la vuelta desde allí.
Os pongo alguna fotillo
Esta última es en el embalse romano de Proserpina .. Nos faltó el bañito.
Saludos
Isabel