Un viaje de invierno
Etapa 7
Cuenca- Barajas de Melo
No todos los días puedo decir he desayunado en Cuenca porras.
Cuenca, no es la primera vez que lo afirmo, es una maravilla, una maravilla singular en la que parece que alguien se empeña en jugar con su realidad.
En un primer momento fue tan solo el Palacio de la Música, un edificio no muy agraciado que por lo menos, aún cuando quedaba a la vista, se emplaza lejos de la ciudad monumental, no podían quedarse ahí, en pleno centro le añadieron una apuesta realmente arriesgada:
El museo de las ciencias en una zona declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco.
Verlo vosotros mismos.
http://www.panoramio.com/photo/6959256
http://www.flickr.com/photos/pepebarambio/3244128809/
Supongo que ese museo era fundamental para el desarrollo de la ciudad, que no había otro lugar mejor donde colocarlo…
El desayuno y el resto de la visita me han apartado de esa visión y de los pensamientos que invadían mi mente.
Mi ruta enlazaba esos dos ríos que recogen esa piedra sobre la que se asienta la ciudad monumental, resiguiendo el Júcar lentamente me he ido alejando en busca de la soledad que esa provincia emana rompiendo sus costuras.
Tras flirtear con todas y cada una de las carreteras que me asaltaban, finalmente he llegado a la paz buscada en la CM2019, carreterita en suave bajada que reseguía un cauce: el río mayor del que me he apartado en Huete.
Huete, ciudad con interesantes vestigios árabes es una de esas poblaciones que persigo, resaltaré algo que me sorprendió cuando buscaba información: tiene Himno con música y letra y pensé: que yo sepa no conozco ninguna población cercana a la que vivo que lo tenga.
Tras Huete venía el paso a otra pequeña población: Vellisca donde he merendado tres km de alto estupendo y tras el la caida
La caida a…
En todos los viajes te pierdes, en todos los viajes llega un momento en el que debes de elegir, en todos los viajes esa elección a veces es acertada o equivocada, en este caso un canal, en la vida una decisión, en este caso un camino que junto al canal te pasaba por multiples barrancos y bosques increíbles, en la vida la necesidad de otear el horizonte, en este caso la salida se llamaba Paredes de Melo, para tras realizar más km. de los que hubiera sido necesario encarar el fin del día de hoy…
En la vida… el presente se convierte en futuro.
Tras superar un alto, me dejo caer a mi destino en el día de hoy: una desconocida Barajas de Melo desde donde atisbo mi destino.
Cena… En el hotel no daban cenas así que me fui al mesón José en la animada calle san Francisco
Desayuno… porras en el hotel, del mercado me han dicho, un poco más y pregunto donde estaba el mercado
Comida: En Huete, restaurante Duque
Alojamiento: Pensión la peseta en Barajas de Merlo.